Mi biografía:
Hola! Mi nombre Gastón tengo 16 años, tengo un hermanito de 9 años. Vivo en Corrientes, Argentina. Me gusta salir con mis amigos y pasarla bien. Voy al colegio Saint Forks, a quinto año, como se deben imaginar. Actualmente es una escuela mixta, pero antes era un establecimiento a la que solo concurrían varones. Pues, me gusto este último cambio, ahora van chicas y la escuela es más divertida. Mis padre son médicos, la mayor parte del tiempo no están en la casa, se la pasan trabajando. Ese tiempo lo aprovecho muy bien, estoy solo, relajado, hundido en mis pensamientos.
Comprendan, no soy un genio.
No soy perfecto, como todos, tengo mis defectos. Muchas personas me tratan como genio, pero no soy como tal.... soy un chico normal, con sus defectos y virtudes y que también comete errores y aprende de ellos. Admito que alguna vez pude ser algo presumido, bueno muy presumido, pero la vida me ha dado tantos golpes y de ellos he aprendido muchísimo, principalmente que no soy distinto a los demás, en otras palabras... no soy un genio.
Cinco perritos de mi tía.
Los sábados a la mañana me voy a visitar a mi tía, recuerdo que la última vez que me fui, me había contado una historia, esta se llamaba los cinco perritos de mi tía. Esta trataba sobre una mujer que había adoptado 2 cachorros, porque se sentía muy sola. Al otro sábado su perra había tenido 3 cachorritos, el quinto perrito, el más chiquito, era igual a su mama, con esa mirada rara. Al principio, solo de pensarlo, era tenebroso... la mujer lo tomo y lo miro, el pequeño lloraba, entonces lo acarició y lo soltó, al hacerlo sintió algo molesto y doloroso en su mano, sangraba, era ese perro, le había clavado sus dientes pequeños en la mano, ¡Como habrá dolido! Se fue adentro de la casa y busco una venda, u se envolvió la mano con esta. En la noche se sentía rara, no podía dormir. Fue entonces cuando decidió ir a buscar al perrito. Cuando lo encontró estaba solito, apartado de los demás. Ella se dio cuenta de que todos necesitaban cariño, hasta el más pequeño, que no solo porque su mamá lo protegiera mas, no necesitaba afecto.
Igual que un naufrago.
Era una tarde tan oscura que casi se la confundía por noche. Estoy exagerando algo… pero no tengo otra forma de describirla. Me fui a visitar a una amiga, ella es muy hermosa, sin mencionar que es una chica carismática. Volviendo al tema de la visita, cuando llegue a su casa y pregunte por ella, su madre me contestó que Jenny se había ido y que no regresaba desde esa misma mañana. 
Me preocupe mucho, entonces decidí llamarla a su celular. Me atendió la voz de un muchacho, y cuando pregunte quien era, y que hacía con el celular de Jenny me dijo que él era su novio. Esa última palabra me dejo paralizado de la decepción… yo que pensé que nos contábamos todo, pensé que me iba a contar lo suyo con este muchacho… pero al parecer me equivoqué. No es solo eso lo que me pone mal, sino que también yo pensé que algún d iba a poder salir con ella. En este momento me siento como un tonto, me siento igual que un naufrago, sin rumbo a donde ir.
Por fin llegamos al palacio.
La tarde del 26 de enero… me fui a un lugar… no sabría explicar donde quedaba, ni como llegue… pero se que yo estaba allí… Al otro día llame a mi mejor amiga, Jenny, y nos fuimos a ese lugar, ni si quiera supe como regrese a ese sitio… la cuestión es que estaba allí. Al llegar dije: “llegamos al palacio”. Le pregunte si lo conocía. Y para mi asombro, dijo que si. Que ella solía venir cuando era niña, y que nunca me lo dijo porque, a pesar de que hayamos sido tan amigos, pensó que yo diría que deliraba si me decía que era un sitio tan precioso. Al finalizar esta conversación, Jenny me pregunto porque yo había dicho “llegamos al palacio” si no había ni si quiera una casa. Le conteste que no se lo tomara tan literal… que buscar más, el significado de la frase… me miro con una cara de no entender nada, entonces volví a explicarlo. Este lugar no es tanto para llamarlo paraíso, está bien, es muy bello, pero solo si hay alguien además de ti, porque no vale la pena vivir en un lugar tan bonito como este si no se tiene con quien estar.
Llegan visitas.
Después de tanto tiempo, mis parientes de Canadá vienen a visitarnos, y en mi casa estamos todos revueltos, por no decir otra palabra, porque hay que ordenar, limpiar, hacer lugar en el dormitorio de visitas, tantas cosas, que va a terminar el día y yo lo voy a acompañar del cansancio. Los extraño un montón hace como un año que no los veo, pero… yo me pregunto ¿no pueden avisar antes su llegada? Bueno… volviendo al tema de la limpieza, espero poder terminar lo más pronto posible para poder visitar a mis amigos, que hace varios días que no nos vemos, además del colegio, obvio. Cuando al fin termine de limpiar le pregunte a mi mamá, cuando venían las visitas, me dijo que no venían, que solo me lo dijo para que ordenara la casa. Me quede pensando, en cómo se las ingenió. Pero no se me ocurrió nada, entonces decidí salir.
Detective.
En los siguientes días empecé a investigar sobre esa historia, no la encontraba por ninguna parte, busque en Internet otra vez más, hasta que por fin apareció. Resulta que la mujer de la historia era mi tía. Entonces comencé a preguntarme, ¿cómo supo ella que el cachorro necesitaba cariño? Comencé a averiguar más acerca de ella, hasta que por fin llegue a la conclusión: cada persona tenemos cierto afecto por sus mascotas, pero mi tía, amaba sus perritos, por eso, se podría decir que sentía lo que a ellos les pasaba, tenía una extraña conexión con ellos.
Mis ojos ¿son interesantes o son solo ojos?
Después de dos meses del rompimiento de Jenny con su novio, decidí invitarla a una salida de amigos. Me dijo que sí. Cuando llegamos a una plaza de por ahí cerca, me pregunto, que opinaba yo, de su mirada, de sus ojos. No sabía que responderle, jamás en la vida me habían preguntado algo así y nunca me imagine que me lo iban a preguntar. Ella me miró y fue entonces cuando le respondí, una mirada, tu mirada, expresa sentimientos, tus ojos expresan tu estado de ánimo, eso es lo que yo interpreto… Ella se ríe, pero luego me agradece y salimos a caminar.
Continúa la guerra
Hace dos semanas que estoy peleado con mi padre. Es que creo que no me entienden! Siento como si estuviera en una guerra pequeña que no afecta a casi nadie, ya no entiendo lo que pasa en mi casa, todos estamos peleados, ya nadie se respeta, no sé qué hacer. Es fácil decir, todo se va a solucionar pronto, pero lo difícil es darlo por hecho! Muchos deben pensar que estoy delirando, pero no todas las guerras son con armas, asesinatos, entre dos o más países, en síntesis una batalla; también pueden ser entre vecinos, ciudades, incluso entre familiares, como nos pasa a mí y a mi familia, especialmente con mi padre. Quiero entender cómo solucionar este problema, tal vez debo entenderlo a él, o el a mí, no lo se, lo que si se es que continua la guerra.
Amor.
Todos tenemos un amor prohibido, un amor imposible... que nunca pasara. Eso me pasa a mí, tengo un amor que nunca pasara. Ella es mi mejor amiga, Jenny. Desde pequeños jugamos juntos y hasta crecimos juntos. 
Me gusta, es muy hermosa, es única, la quiero muchísimo. Cuando estoy cerca de ella siento que estaré con ella para toda la vida, pero cuando me alejo siento que la perdí. No sé qué hacer.... si le digo, puede que ella no sienta lo mismo y que dejemos de ser amigos o... que me deje de hablar para siempre. Como dice esa famosa frase: “prefiero que seamos amigos antes de no tenerte”. Al escuchar esta frase… razone, y me di cuenta de que amor no solo es el amor de parejas, sino que también es el amor que tenemos por un familiar, amigo, etc.
Nos invitan a una fiesta.
Hoy, con sinceridad, tengo un humor de perros, por decir así. Tengo demasiado sueño, recién vengo del entrenamiento. Lo peor es que justamente hoy, nos invitaron, a mí y a Jenny, a una fiesta. Si voy solo lo hago por ella, es que si no voy, se me hace que voy a quedar muy mal y voy a decepcionar a mi mejor amiga! Yo tomo mas las fiestas como un encuentro entre amigos, en los cuales, ellos entienden si no puedes ir. Pero esa es la diferencia con Jenny, es muy terca. Desde que mire la hora han pasado tres horas y diecisiete minutos. Es tiempo de ir a la fiesta… pensándolo bien, no me importa que piensen, cada uno tiene derecho de hacer lo que quiere, pero hare un esfuerzo e iré…. Me voy a vestir.
¡Qué mal estuve!
Recién me despierto, miro la hora, son las 6 de la mañana. Wow!, me quiero morir, la fiesta era a las 21:30, ya termino. Jenny debe de estar enojada con migo, no sé qué le voy a decir ahora.
Tengo que inventarle algo, que puede ser… Encima, sobre todo, ahora tengo que ir al colegio, ella va a estar ahí, con esa cara que me asusta cuando se enoja. Soy un boludo, como puedo dormirme así, eso es de holgazanes. No se si quiero ir a la casa de pablito… Ahora no quiero, pero tengo que ir, ya le dije que si o si iba a ir. Ahora mismo me visto... si no va a pensar que no quiero ir, pero tendre que apurarme asi no llego al mismo tiempo que ella.
De todas maneras me siento muy mal por no haber asistido a esa fiesta… si no tenia oportunidad alguna con ella, ¡menos la tendré ahora!
